Los socialistas creemos que para construir una Europa más justa, libre, igualitaria, fuerte y segura hay que dignificar las políticas públicas dirigidas a los europeos que residen en el exterior y hacerlo con un carácter integral.
Los socialistas defendemos una ciudadanía integradora, basada en derechos y responsabilidades, que consagre los mismos derechos a los ciudadanos poner a los emigrantes europeos residentes en el exterior. Apostamos por europeos en el centro de la agenda política, reconociendo sus derechos.
El Partido Popular dice defender a los emigrantes pero en los ocho años de Gobierno del PP la situación de las políticas públicas hacia la emigración fue de total parálisis y de retroceso respecto a las medidas adoptadas por los gobiernos socialistas. En el Parlamento Europeo tampoco han mostrado interés por equiparar derechos.
Europa es importante en el ámbito de la emigración, porque: • La ciudadanía europea concede a todos los ciudadanos europeos, incluidos a los ciudadanos que residen en el exterior, los mismos derechos: derecho de libre circulación y residencia en la Comunidad; derecho a votar y a ser candidato en las elecciones europeas y municipales en el Estado de residencia; derecho a protección diplomática y consular de un Estado miembro distinto del de origen en el territorio de un país tercero en el que el Estado de origen no tenga representación; derecho de petición ante el Parlamento Europeo y a presentar una denuncia ante el Defensor del Pueblo Europeo.
• Estos derechos fueron desarrollados y ampliados en la Carta de los Derechos Fundamentales, que reúne por primera vez en un solo texto los derechos civiles, políticos, económicos y sociales.
¿Qué ha hecho el PP?
En Europa y en España No ha planteado ni una sola medida en Europa a favor de los emigrantes porque este tema no les interesa.
Ha rechazado en el Parlamento Europeo, en el informe sobre la ciudadanía de la Unión, la necesidad de dar cumplimiento efectivo entre los europeos en el exterior sus derechos de ciudadanía de la UE y de adoptar las medidas oportunas para mejorar las condiciones de ejercicio de los derechos que le confiere la ciudadanía europea, garantizando su plena efectividad.
Ha demostrado que persigue única y exclusivamente la recaudación de votos, tratando a los ciudadanos residentes en el exterior como ciudadanos de tercera de los que sólo se ocupa en el momento en el que se aproximan unos comicios.
Han rechazado la ley de Memoria Histórica con la que se aprobó la nacionalidad para los descendientes de emigrantes españoles.
En los ocho años de Gobierno del PP la situación de las políticas públicas hacia la emigración fue de total parálisis y de retroceso respecto a las medidas adoptadas por los gobiernos socialistas. En esos ocho años, el incremento en el número de beneficiarios de pensiones asistenciales no llegó a los 3.000.
Han tratado de disminuir el impacto de los avances en prestaciones sociales, afirmando que se ha producido una “rebaja generalizada” de las pensiones. No es verdad; sólo en los dos primeros años de la legislatura pasada se duplicó el presupuesto. Hoy todos los emigrantes españoles que reciben una prestación asistencial tienen asistencia sanitaria gratuita y, por fin, se ha dado
reconocimiento a los niños de la guerra, deuda histórica de la sociedad española.
Ha creado confusión sobre la ampliación de la asistencia sanitaria universal para todos los españoles que residan en el extranjero. Esta medida es un disparate presupuestario que podría suponer unos 2.100 millones de euros anuales con el agravante de posibles fraudes, que nos permiten afirmar que sería una promesa incumplida.
Ha conseguido con sus propuestas entorpecer el voto exterior. Al añadir nuevos requisitos para votar (una fotocopia del pasaporte o del DNI expedidos por las autoridades españolas o, en su defecto, certificado de nacionalidad facilitado por el consulado de España en el país de residencia) hace cada vez más difícil a los españoles residentes en el exterior su participación.
¿Qué hemos hecho los socialistas?
En Europa y en España Hemos promovido que la ciudadanía de la Unión garantice los mismos derechos a todos los ciudadanos de la Unión Europea independientemente de que su lugar de residencia se sitúe en el seno de la propia Unión o en un tercer Estado y que se deben adoptar las medidas oportunas a fin de garantizar que sus derechos de ciudadanía se hagan efectivos.
Hemos introducido la necesidad de que se establezca un número de teléfono europeo gratuito, que figuraría en el pasaporte junto al artículo 20, por medio del cual los ciudadanos de la Unión puedan, en caso de emergencia, acceder en su idioma a la información necesaria sobre los consulados de los Estados miembros para lograr la asistencia necesaria.
Hemos defendido con éxito que se vaya imponiendo la denominación de "españoles en el exterior" o "ciudadanos españoles en el exterior" con el fin de englobar a los distintos orígenes de los cerca de dos millones de españoles residentes en el exterior, ya sean exiliados o emigrantes, segundas y terceras generaciones, profesionales desplazados, cooperantes o estudiantes en movilidad.
Hemos colocado a los emigrantes españoles en el centro de la agenda política, reconociendo sus derechos y elevándoles a la categoría de españoles. Rodríguez Zapatero ha sido el único presidente del Gobierno que ha acudido al Pleno del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior.
Hemos aprobado el Estatuto de la Ciudadanía Española en el Exterior que garantiza la igualdad de derechos y deberes constitucionales de los españoles en el exterior y que supone superar el marco normativo preconstitucional. Hemos puesto en marcha su desarrollo reglamentario.
Hemos consolidado y extendido el sistema de pensiones asistenciales: aumento sin precedentes de los beneficiarios.
Hemos garantizado una asistencia sanitaria y farmacéutica digna: ampliación de los Convenios de asistencia sanitaria y revisión de los Convenios firmados para ofrecer unos servicios sanitarios de calidad.
Hemos llevado a cabo el reconocimiento de una prestación económica a los llamados “Niños de la Guerra”, de la que se han beneficiado más de 2.100 personas.
Hemos renovado la estructura administrativa, nueva composición y funcionamiento del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior, con el objetivo de impulsar la participación y la proximidad de los ciudadanos españoles en el exterior a través de la Oficina Española del Retorno y la creación del Portal de Internet dirigido a los españoles en el exterior.
Hemos aprobado un Real Decreto para regular las ayudas destinadas a atender las situaciones de extraordinaria necesidad de los españoles retornados y un Real Decreto para regular la prestación por razón de necesidad para los españoles residentes en el exterior y retornados. Con este decreto, entre otras cosas, se facilita el acceso a la prestación por razón de necesidad para los españoles de origen no nacidos en España y la inclusión de los miembros de las parejas de
hecho.
Hemos aprobado la Ley de Memoria Histórica que permite ampliar el acceso a la nacionalidad española a los hijos de padre o madre españoles de origen y a los nietos de los que perdieron o tuvieron que renunciar a la nacionalidad española como consecuencia del exilio.
Hemos mejorado los servicios consulares en el exterior con la creación de nuevos consulados generales de España.
Hemos reformado la Ley Electoral General para que los votantes que se encuentren
temporalmente fuera de España en el momento de las elecciones puedan ejercer su derecho sin problemas, como es el caso de los estudiantes en el extranjero.
Hemos casi triplicado el presupuesto destinado a emigración pasando de los 50 millones de euros que destinaba el PP a 140.586.073,33 que se destinó en 2008.
Nuestros compromisos Los socialistas aspiramos a que la Unión Europea viva orgullosa de su unión en la diversidad, respetando las diferencias, buscando la cooperación mutua y la solidaridad. Por eso, más que nunca necesitamos un Parlamento progresista que continúe ampliando y defendiendo los derechos y las libertades fundamentales de los ciudadanos europeos en el exterior.
Los socialistas nos comprometemos a: Seguir defendiendo una Europa que apueste por la inclusión y la plena integración en nuestras sociedades de los ciudadanos europeos residentes en el exterior, evitando su discriminación en el disfrute de derechos y libertades.
Seguir efectuando las reformas legales necesarias para que los españoles residentes en el exterior cuenten con una circunscripción propia en el Parlamento.
Seguir mejorando las pensiones no contributivas de los españoles en el exterior.
Apoyar la creación de una Oficina de Defensa del Español en el Exterior.
Promover la cooperación de la Administración para centralizar la información de retorno en la Oficina del Retorno y crear el Portal del Retorno.
Crear una circunscripción específica para el Parlamento que integre al millón y medio de españoles que residen en el extranjero. Esta propuesta requiere una modificación de la Constitución.
Seguiremos trabajando para facilitar el ejercicio del derecho al voto para todos los españoles en el exterior mediante las nuevas tecnologías (voto electrónico) y la reforma del voto en urna.
Seguiremos mejorando las becas para que los descendientes de los españoles en el exterior puedan cursar estudios en España.
Agradecemos a Gustavo López, Sec. Acción Electoral PSOE Buenos Aires